FUENTE: RED UNO.
“Según la versión de Evo Morales, si no hay muertos no hay golpe de Estado. Entonces lo que ocurrió, según Evo Morales, el 2019 no fue un golpe de Estado”, señaló Del Castillo.
El intercambio de declaraciones entre el expresidente Evo Morales y el ministro de Gobierno de Bolivia, Eduardo Del Castillo, ha agitado el escenario político del país. Tras las afirmaciones de Morales cuestionando la versión oficial sobre el supuesto «golpe de Estado fallido» reciente, Del Castillo respondió tildando a Morales de «mitómano compulsivo» y asegurando que está mal informado sobre lo sucedido en la plaza Murillo.
“Según la versión de Evo Morales, si no hay muertos no hay golpe de Estado. Entonces lo que ocurrió, según Evo Morales, el 2019 no fue un golpe de Estado”, señaló Del Castillo.
Según Del Castillo, Morales parece sugerir que un golpe de Estado solo puede ser validado si hay pérdidas de vidas humanas, lo cual no ocurrió el día de su renuncia en 2019.
El ministro argumentó que la ausencia de víctimas el día de la renuncia de Morales no invalida la clasificación de los eventos como un golpe de Estado, aunque reconoció que las muertes ocurrieron al día siguiente.
Por su parte, Morales reiteró sus críticas durante su programa dominical, acusando al presidente Luis Arce de haber mentido al pueblo boliviano y al mundo sobre la naturaleza del evento reciente, describiéndolo como un «autogolpe». Estas afirmaciones de Morales han intensificado el debate público sobre la legitimidad de los eventos políticos recientes en Bolivia.