FUENTE: EL DEBER.
La organización eclesiástica repudió la acción militar que perturba la estabilidad democrática. Este miércoles, 26 de junio, el comandante del Ejército, Juan José Zúñiga, intentó tomar el antiguo Palacio Quemado.
La Conferencia Episcopal de Bolivia repudió el intento de golpe de Estado. La tarde de este miércoles, efectivos del Ejército Nacional de Bolivia ingresaron a la Plaza Murillo e instalaron un perímetro de seguridad, a la cabeza de su comandante, Juan José Zúñiga, que aseguró que la acción era para “recuperar esta Patria”.
“Frente a los acontecimientos suscitados el día de hoy (miércoles), de la presencia militar en inmediaciones del Palacio de Gobierno, repudiamos toda acción que va en contra de perturbar la estabilidad democrática de nuestro país”, señala el comunicado de la Iglesia católica.
Luego en su pronunciamiento la entidad religiosa agrega que “la convivencia pacífica debe ser garantizada por toda institución pública. Llamamos a que se respete el orden constitucional y se busquen espacios de diálogo para solucionar los conflictos. Que nuestra madre, la Virgen María, Reina de la Paz, interceda por todos, en particular por la situación social que vive nuestro país”.
Tanto el presidente Luis Arce Catacora, como el vicepresidente David Choquehuanca, denunciaron un golpe de Estado.